JARÁCUARO AÑO NUEVO PURÉPECHA

José Valencia Oceguera, es profesor de educación primaria egresado de una normal rural, además estudió sociología en la Universidad Autónoma Metropolitana. Actualmente es maestro de la Universidad Michoacana en donde ya cuenta con 30 años y se define como un michoacano interesado en su cultura por lo que trata continuamente de ser parte del fortalecimiento de las manifestaciones indígenas. Originario de Zacán Michoacán, una de las comunidades afectadas por la erupción del volcán Paricutín, Valencia Oceguera participó en las pláticas que explicaron el significado del Año Nuevo Purépecha a los interesados, organizadas afuera de lo que conoceríamos comúnmente como salón ejidal en la comunidad de Jarácuaro Michoacán, sede de este encuentro.

Casi al finalizar las pláticas en donde se intercambiaron ideas sobre lo que es ser purépecha, la importancia de ser carguero y la continuidad de la celebración del Año Nuevo, el maestro José caminó hacia el lugar de la danza y la música en la explanada del templo principal del pueblo, el sol estaba ya declinando en sus últimos rayos, corrimos para interceptarle y así pedirle que nos regalara algunas apreciaciones. Conversamos con él sobre la revaloración de la cultura indígena, sobre todo dentro del sistema educativo mexicano que intenta borrar la tradición en pos de una pretendida y nunca lograda unificación; además mencionó la problemática actual a la que se enfrenta el purépecha que vive en una zona de conflicto producto de la guerra de Calderón contra el narcotráfico; y por último habló de su trabajo en radio Uandari, radio comunitaria que como otras se encuentra constantemente acosada por las grandes compañías dueñas del espectro radial en el país.

EL PURÉPECHA ESTÁ LOGRANDO REVERTIR LA DESINTEGRACIÓN QUE HA PROVOCADO EL SISTEMA EDUCATIVO

Don José señala, para los que desconocen el tema, que el año Nuevo Purépecha corresponde a una serie de actividades que se retoman de una tradición muy antigua entre los purépechas, cuando se realizaba una ceremonia importante al terminar cierto ciclo de año y en esta festividad se realizaban un conjunto de acciones, todas ellas importantes, como el hecho de ir por leña para las hogueras que se usaban para el encendido e incluso los días aciagos en los que se tenía que hacer penitencia para llegar al año nuevo, días para hacer penitencia, oración, meditación, es decir, no se hacían las actividades cotidianas y se reflexionaba en la importancia de los nuevos ciclos que se iban dando en la sociedad. Entonces, reitera, era una ceremonia muy importante, e hizo alusión a la Relación de Michoacán que contiene en su primer capítulo detalles sobre esta tradición, con la finalidad de fortalecer la identidad que desgraciadamente en las comunidades originarias tiende a perderse porque la educación pública del sistema mexicano ha tenido como misión integrar a los pueblos indígenas a la realidad nacional, formar la visión de un pueblo mexicano y se ha olvidado de la visión del pueblo purépecha. El también sociólogo agregó que en algunos momentos incluso se veía un esfuerzo por integrarnos pero desintegrándonos que les iba resultando pero que no contaba con que varios purépechas no estuvieron de acuerdo, por lo que cada quien en diferentes trincheras ha luchando porque no desaparezca la tradición, que es idioma, es vestido, es cosmovisión, es la costumbre para consumir ciertos tipos de comidas, el trato con la naturaleza, es una integral, grande y pareciera ser que está logrando avances.

EL NARCO EN LAS COMUNIDADES INDÍGENAS

Cuando le preguntamos si el narcotráfico está afectando este esfuerzo de identidad purépecha debido a las condiciones de violencia por las que atraviesa Mihocacán, contestó que si pero no de manera sustancial, y señaló que: “hace algunos días leí en un periódico que habla de unas comunidades que se organizaron de tal manera que cuando intentaron extorsionarlos lograron negarse, ese es el ejemplo de organización más patente, y creo que hay muchas comunidades que están cayendo en esta introspección de decir qué está pasando. Yo quisiera ser optimista para pensar en que no nos van a afectar tanto”. Sin embargo dijo que en el caso de lo agrario si hay problemas preocupantes porque hay gente ajena a la comunidad que amparados en la reforma al artículo 27 constitucional de 1992 -donde el ejido y la comunidad indígena se pueden vender-, se han establecido en comunidades indígenas que han comprado tierras para lavar dinero o para otras cosas y ya han ocasionado internamente algunos problemas. Agregó que los purépechas no viven fuera de la realidad: “claro que estamos resintiendo sin embargo creemos que también puede servir para tener claridad de lo que está pasando”.

RADIO COMUNITARIA

También le preguntamos sobre la situación de las radios comunitarias, en su caso de Radio Uandari que significa comunicador en donde él labora. Mencionó que aunque se ha vinculado últimamente a las radios comunitarias con el crimen organizado con el fin de desprestigiarlas como parte de un manejo político que maquiavélicamente realizan cadenas grandes de radio y televisión para impedir que les otorguen permisos, por lo menos a él le da mucho gusto participar en una radio con 120 participantes. El maestro agregó que Radio Uanari se ha ido construyendo con la participación muy activa de diferentes tipos de personas: niños, mujeres, discapacitados, y puso el ejemplo de un par de ciegos que llevan cuatro años haciendo programas, al igual que las personas de la tercera edad y hasta las instituciones educativas como las universidades o el colegio de bachilleres. En pocas palabras a esta radio la distingue la diversidad lo que no está peleado con el concepto de radio comunitaria y dijo: “para que esta radio se mantenga pedimos a cada uno de los que entran que participen con aportaciones económicas y por eso nunca se nos ha cortado la luz, el teléfono, a veces transmitimos por Internet. Tenemos de varios estilos de música, desde lo tradicional hasta blues o jazz. Nos hemos mantenido fuera de los conflictos políticos y religiosos, somos una asociación civil que lleva 9 años y hemos logrado nuestra autonomía”.

Al fin de la entrevista pedimos al maestro José le mandara un mensaje en purépecha a los acambarenses en donde pidió a todos los que viven en Guanajuato de raíz purépecha, que recuperemos nuestras fiestas indígenas como lo han logrado hacer en Michoacán.

1 comentario:

Unknown dijo...

Les comparto mi poema, inspirado en . . .

KURHÍKUAERI K’UÍNCHEKUA

“Leña de encino, de ocote, piedras, yesca, . . . el fuego brote.”

Dios de la llama flamante,
pindekua preponderante,
caminata por los montes,
resplandecer de horizontes.

Transportado por cargueros,
con destellos, con luceros,
fogón de cuatro regiones,
alumbrando corazones.

En sede la recepción,
¡que viva la tradición!,
guardar, resguardar la lumbre
y velarla es la costumbre.

¡Gran festividad michhuaque!,
la fecha en el almanaque,
prehispánico es el ritual,
la mitología ancestral.

El simbolismo profundo,
no a la destrucción del mundo,
solo muere el astro viejo,
dejando triste reflejo.

Por el poniente fenece;
mas . . . al oriente florece,
el vigor y la pujanza,
la existencia, la esperanza.

Renacer del Sol creador,
joven lleno de esplendor,
fresco el día, ha comenzado,
la vida se ha preservado.

P’urhépecha ceremonia,
¡cultura que da la gloria!,
ha iniciado el año nuevo,
con encendido del fuego.

Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
México, D. F., a 25 de enero del 2013
Dedicado a Tatá Javier Mellápeti Cuiriz
Reg. SEP Indautor No. 03-2013-051712171201-14